El verdel es un pez de una alta importancia comercial en el Cantábrico y también sus diferentes especies objeto de pesca intensiva a lo largo del todo el planeta, lo que le convierte en uno de los pescados azules más consumidos. Sobre todo, entre febrero y mayo, cuando se acercan a la costa durante sus migraciones.
Su carne es saludable y esta tiene multitud de preparaciones, tanto para su consumo en fresco como para la realización de conservas.
Sobre todo, es un pescado azul rico en proteínas y grasas insaturadas con alto contenido en omega-3 (que ayuda a regular el nivel de colesterol y de triglicéridos en sangre).
También tiene valor su alto contenido de vitaminas (A, D, E, B1, B2, B3 y B6 entre otras). La vitamina B12 (de origen animal) está presente en cantidades importantes en este pez. Supera, incluso, a la que contienen las carnes y los huevos.
El verdel también es rico en cuanto a los minerales que aporta. En su organismo están presentes el yodo, el magnesio, el calcio, el potasio y el hierro (aunque en menor medida).
Sin embargo, para aquellas personas que tengan tengan problemas con el ácido úrico se desaconseja su consumo por su alto contenido en purinas.