A lo largo de 2015, Salvamento Marítimo coordinó el rescate o la búsqueda de 15.566 personas en 5.462 intervenciones. El 55% de las emergencias correspondió a barcos de recreo, el 15% a pesqueros, el 11% a mercantes y el resto a otro tipo de buques, emergencias en actividades recreativas como surf, windsurf, submarinismo, caídas al mar, rescates en acantilados y rescates de personas que intentaban llegar a las costas españolas en pateras.
Como indica la página web de Salvamento Marítimo, «de todas las flotas civiles, mercante, pesquera y de recreo, la última es la más frágil por las dimensiones de las embarcaciones y por ser, generalmente, tripulada por navegantes no profesionales. La práctica y la experiencia son cualidades difíciles de adquirir para muchos de los tripulantes de la flota de recreo, ya que suelen navegar de forma esporádica y durante cortos períodos de tiempo».
Las estadísticas de los últimos años -a la espera de la memoria de 2016 que no es probable que refleje un cambio de tendencia- indican que entre el 60% y el 65% de las emergencias protagonizadas por la flota de recreo son estacionales, surgen a lo largo de los meses de vacaciones estivales de junio, julio, agosto y septiembre.
Las mismas estadísticas señalan el error humano como una de las causas principales de los accidentes, seguida por los fallos mecánicos. Todavia hoy un causa tan evitable como quedarse sin combustible en la mar obliga a las intervenciones de Salvamento Marítimo.
Unos minutos móvil en mano, antes de soltar amarras, sin dejar la responsabilidad a la memoria o las prisas, pueden ser decisivos para asegurarse una navegación tranquila
La previsión y el mantenimiento podrían evitar muchos de estos accidentes que pueden tener graves consecuencias. Para ello, Salvamento Marítimo tiene una aplicación para teléfonos móviles que «no va dirigida expresamente a experimentados navegantes y deportistas, pero puede ser de gran utilidad para los menos habituados a navegar y servir de recordatorio para todos». Unos minutos móvil en mano, antes de soltar amarras, sin dejar la responsabilidad a la memoria o las prisas, pueden ser decisivos para asegurarse una navegación tranquila.
«Salvamento Marítimo: Seguridad náutica», aplicación disponible para moviles con Android o IOS, sugiere, en cuanto es abierta, dos listas -una sencilla y otra extendida- para la comprobación de los elementos básicos del barco antes de zarpar.
La más sencilla aconseja comprobar los niveles de combustible y el agua potable, los equipos de comunicaciones, la estanqueidad y los sistemas de achique, la existencia de chalecos salvavidas para cada tripulante y los sistemas contra incendios.
La lista extendida, y más recomendable, recuerda consultar la predicción meteorológica antes de abandonar el puerto, revisar los equipos de navegación y gobierno, el combustible y el agua potable, los equipos de comunicaciones, tener cartas náuticas de la zona, comprobar el equipo de propulsión, la estanqueidad y los sistemas de achique, el estado de las baterías y las tomas de corriente, de las luces de navegación, de las linternas y pilas de repuesto, asegurarse de que hay chalecos salvavidas para cada tripulante, revisar el estado de los arneses de seguridad y del resto del equipo de seguridad, los sistemas contra incendios, los reflectores de radar y radiobalizas, tener el plan de navegación, la documentación del barco y las anclas y cabos a punto.